Que no lloren tus cuerdas de tristeza,
adhierete a mi y cerrare los ojos,
que se prolongue mi alma con tus notas
y así seremos uno, mi inseparable amigo
dame esa fuerza nueva que desconozco
y guíame con tu música en esta nueva senda
no hay miedo ni tristeza si estas conmigo,
tu y yo juntos caminando de la tierra al cielo
y el universo entero sabrá de ti y de mi.
Irma Villalobos.
En honor a alguien que ya es libre y toca su violín por todo el Universo.